Picnic en Hanging Rock, de Joan Lindsay
6 sept 2018
La autora: Joan Lindsay fue una escritora que nació en 1896 en Victoria, Australia. Conocida por su célebre novela "Picnic en Hanging Rock" pero también habiendo escrito artículos, reseñas y relatos en diversas publicaciones de arte y literatura.
De Picnic en Hanging Rock, Joan declaró que se había basado en un evento contemporáneo, pero jamás admitió o desmintió que el acontecimiento descrito en su novela ocurriese realmente. Creando todavía si cabe una atmósfera más inquietante y ambigua a la hora de proceder a su lectura.
PICNIC EN HANGING ROCK:
De Picnic en Hanging Rock, Joan declaró que se había basado en un evento contemporáneo, pero jamás admitió o desmintió que el acontecimiento descrito en su novela ocurriese realmente. Creando todavía si cabe una atmósfera más inquietante y ambigua a la hora de proceder a su lectura.
PICNIC EN HANGING ROCK:
La ambientación se produce en la campiña del sur de Australia, principalmente en dos escenarios clave y uno secundario, estos son: el colegio o internado para señoritas Appleyard, el monte Diógenes donde se encuentra Hanging Rock y la residencia del Coronel Fitzhubert.
La novela trata un periodo de tiempo que abarca aproximadamente un mes, desde los hechos que ocurren el 14 de febrero de 1900, hasta finales de marzo.
La trama recoge los hechos que ocurrieron en Hanging Rock el 14 de febrero de 1900 cuando tres de las alumnas de último curso, Miranda Reid, Marion Quade e Irma Leopold, además de Greta McGraw profesora de matemáticas del ilustre colegio Appleyard, desaparecen misteriosamente en el transcurso de un picnic.
Nada más vuelve a saberse de su paradero, a pesar de los frustrados intentos de la policía en barrer la zona por la que las muchachas podrían haber sido víctimas de una grieta en la montaña, serpientes o arañas venenosas. Incapaces de encontrarlas vivas o muertas se empieza a crear una atmósfera de frustración, incredulidad y mal fario que afecta a toda la comunidad. Desde la directora Appleyard que tendrá que lidiar con la caída en desgracia de la reputación de su institución, así como la responsabilidad de avisar a unos padres ignorantes de los hechos ocurridos allí, hasta como afecta psicológicamente al estado de resto de alumnas y profesoras que sanas y salvas llegaron al colegio después del terrible suceso y que debían aceptar el cambio y la incertidumbre que se les presentaba a partir de ahora. Solo una de ellas consigue salvarse milagrosamente, pero por desgracia no recordará nada de lo sucedido en la montaña, hecho que confundirá más a sus allegados y que alentará a las habladurías y chismes sociales.
Es en mi opinión, una novela coral en la que el lector puede apreciar lo que piensan muchos de los personajes de la novela, sus inquietudes y sus ocurrencias, pero siempre desde el nexo común de los personajes principales, las chicas desaparecidas, la directora Appleyard, Mike Fitzhubert, Albert el cochero, Mademoiselle Dianne, la profesora de francés y otras alumnas como Sara Waybourne o Edith Horton.
A través de su lectura el lector se da cuenta de que no te lo están contando todo, de que hay información que está siendo deliberadamente ocultada y es entonces cuando empiezas a sospechar de cada personaje que aparece en la redacción y los motivos que pueden existir para que ocurra una desgracia, a fin de cuentas, las desaparecidas eran ricas herederas.
Nos encontramos con un hecho, cientos de hipótesis y potenciales culpables. Entre ellos, el conocimiento de un secreto, la trata de blancas, asesinato...
La novela trata un periodo de tiempo que abarca aproximadamente un mes, desde los hechos que ocurren el 14 de febrero de 1900, hasta finales de marzo.
La trama recoge los hechos que ocurrieron en Hanging Rock el 14 de febrero de 1900 cuando tres de las alumnas de último curso, Miranda Reid, Marion Quade e Irma Leopold, además de Greta McGraw profesora de matemáticas del ilustre colegio Appleyard, desaparecen misteriosamente en el transcurso de un picnic.
Nada más vuelve a saberse de su paradero, a pesar de los frustrados intentos de la policía en barrer la zona por la que las muchachas podrían haber sido víctimas de una grieta en la montaña, serpientes o arañas venenosas. Incapaces de encontrarlas vivas o muertas se empieza a crear una atmósfera de frustración, incredulidad y mal fario que afecta a toda la comunidad. Desde la directora Appleyard que tendrá que lidiar con la caída en desgracia de la reputación de su institución, así como la responsabilidad de avisar a unos padres ignorantes de los hechos ocurridos allí, hasta como afecta psicológicamente al estado de resto de alumnas y profesoras que sanas y salvas llegaron al colegio después del terrible suceso y que debían aceptar el cambio y la incertidumbre que se les presentaba a partir de ahora. Solo una de ellas consigue salvarse milagrosamente, pero por desgracia no recordará nada de lo sucedido en la montaña, hecho que confundirá más a sus allegados y que alentará a las habladurías y chismes sociales.
A través de su lectura el lector se da cuenta de que no te lo están contando todo, de que hay información que está siendo deliberadamente ocultada y es entonces cuando empiezas a sospechar de cada personaje que aparece en la redacción y los motivos que pueden existir para que ocurra una desgracia, a fin de cuentas, las desaparecidas eran ricas herederas.
Nos encontramos con un hecho, cientos de hipótesis y potenciales culpables. Entre ellos, el conocimiento de un secreto, la trata de blancas, asesinato...
La lectura es detallada, la autora explica con precisión la ambientación, el caos de la desaparición y la evolución de los personajes. Es una lectura que recuerda a los clásicos góticos y victorianos, salvando las diferencias. Particularmente a mi, aunque me gustó y me enganchó, mi lectura sufrió de altibajos, ya que podía devorar capítulos sin cesar y de repente alejarme completamente de la trama y desconectarme de la lectura. Es un buen libro, una buena historia y mantiene hasta el mismo final el aura desconcertante con la que el libro da al lector la bienvenida.
Perfecto para lectores amantes de las literaturas clásicas victorianas, con misterio y llenas de ambigüedad.
Existen actualmente dos adaptaciones llevadas al cine y a la televisión, la primera de ellas, la película de 1975 dirigida por Peter Weir y que cosechó un gran éxito. La segunda adaptación, una reciente mini serie producida por Amazon que se ha estrenado este mismo año y con Natalie Dormer en el papel de la Directora Appleyard. Sin duda, dos grandes opciones para disfrutar y complementar esta curiosa novela que tanto da que hablar.
Mi libro:
Editorial Impedimenta
Tapa blanda
307 páginas
20€ aprox.
Introducción de Miguel Cane en la cual pone en contexto histórico, social e incluso sensorial al lector.
Traducción de Pilar Adón
- Me ha gustado particularmente esta edición porque además de parecerme super bonita, está super cuidada. La solapa y la cubierta mantienen el mismo patrón. El tacto es suave y el papel de calidad. Me encanta que traiga pequeñas anotaciones en los márgenes inferiores para que el lector no tenga ninguna duda y no se distraiga de la lectura. Por último, la postal de cartulina en miniatura de la portada del libro me parece un detallazo.
Perfecto para lectores amantes de las literaturas clásicas victorianas, con misterio y llenas de ambigüedad.
Existen actualmente dos adaptaciones llevadas al cine y a la televisión, la primera de ellas, la película de 1975 dirigida por Peter Weir y que cosechó un gran éxito. La segunda adaptación, una reciente mini serie producida por Amazon que se ha estrenado este mismo año y con Natalie Dormer en el papel de la Directora Appleyard. Sin duda, dos grandes opciones para disfrutar y complementar esta curiosa novela que tanto da que hablar.Mi libro:
Editorial Impedimenta
Tapa blanda
307 páginas
20€ aprox.
Introducción de Miguel Cane en la cual pone en contexto histórico, social e incluso sensorial al lector.
Traducción de Pilar Adón
- Me ha gustado particularmente esta edición porque además de parecerme super bonita, está super cuidada. La solapa y la cubierta mantienen el mismo patrón. El tacto es suave y el papel de calidad. Me encanta que traiga pequeñas anotaciones en los márgenes inferiores para que el lector no tenga ninguna duda y no se distraiga de la lectura. Por último, la postal de cartulina en miniatura de la portada del libro me parece un detallazo.
