Feliz día Internacional del Libro
23 abr 2018
365 días, casetas, parques engalanados, tenderetes, puestos de comida, librerías con sus mejores galas, quioscos, cajas llenas de recientes de imprenta, los dedos sucios de tinta, banderines de colores de farola en farola. La primavera viene con un libro debajo del brazo. Varios curiosos se acercan a echar un vistazo, ¿podemos atenderle en algo?, sólo estoy mirando. Caras conocidas de otros años, a otros no los has visto en la vida. Aquél parece que no se atreve, tiene la mirada tímida. Un ladronzuelo de la cultura arranca con sigiloso cuidado el cartel de este año de la feria. Al fondo la misma pareja del año pasado, este año ella ya no se resigna, le estampa la rosa a él en la cara y huye corriendo con su libro. Los tiempos cambian y las palabras en su día disfrutan del ordenado caos con el que los organizadores ultiman hasta el mínimo detalle "...Que todo salga bien".
Gritos de niños preadolescentes alborotados, su nuevo ídolo al que también le cuelgan los pañales ha llegado y con un solo gesto, obedientes ellos callan y compran. Por la mañana estaba nublado, pero ahora el sol pica en la cara, "que me traigan la crema, y las gafas". Más gente, más compra, más venta, algún listo secuestra bajo la chaqueta uno de los libros, no pasa nada, la señora de al lado ha roto aguas y dice que sin su libro no hay hospital que valga.
Otra vez la rosa y el libro, los Jorge de fiesta, dominando al dragón hasta su muerte. Épicos los trastornos de tiempo y llegada al siguiente punto de firma cerrada entre mareas humanas que te cogen del brazo y con el otro la cámara para el selfie, y tú ahí, con el maquillaje como un cuadro impresionista desde las 08:00 de la mañana, con sed y hambre, pero sin tiempo, con la sonrisa clavada en la cara porque de verdad esto es impresionante pero no sabes si llegarás viva a mañana. Y tu dedo corazón sacando callo y el boli que se ha quedado sin tinta. Son gajes del oficio.
Dar muchos besos, agradecer todo a todos, preguntarse por qué te has puesto los tacones que rozan, pero que bonitos son. Que te hagan más fotos, que encuentres a tus compañeros y te regalen las pocas fuerzas que os quedan, porque sabéis que a esta aventura habéis subido todos y después unos bailes locos y un vino.
Gracias a las letras, a los libros. A vosotros por hacerlos, a cualquiera por escribirlos. Por hacernos viajar y vivir todas las vidas que no estaban destinadas a ser para nosotros. Y aquí están. Al alcance de la mano.
Feliz día Internacional del Libro
Feliç Sant Jordi.
Gritos de niños preadolescentes alborotados, su nuevo ídolo al que también le cuelgan los pañales ha llegado y con un solo gesto, obedientes ellos callan y compran. Por la mañana estaba nublado, pero ahora el sol pica en la cara, "que me traigan la crema, y las gafas". Más gente, más compra, más venta, algún listo secuestra bajo la chaqueta uno de los libros, no pasa nada, la señora de al lado ha roto aguas y dice que sin su libro no hay hospital que valga.
Otra vez la rosa y el libro, los Jorge de fiesta, dominando al dragón hasta su muerte. Épicos los trastornos de tiempo y llegada al siguiente punto de firma cerrada entre mareas humanas que te cogen del brazo y con el otro la cámara para el selfie, y tú ahí, con el maquillaje como un cuadro impresionista desde las 08:00 de la mañana, con sed y hambre, pero sin tiempo, con la sonrisa clavada en la cara porque de verdad esto es impresionante pero no sabes si llegarás viva a mañana. Y tu dedo corazón sacando callo y el boli que se ha quedado sin tinta. Son gajes del oficio.
Dar muchos besos, agradecer todo a todos, preguntarse por qué te has puesto los tacones que rozan, pero que bonitos son. Que te hagan más fotos, que encuentres a tus compañeros y te regalen las pocas fuerzas que os quedan, porque sabéis que a esta aventura habéis subido todos y después unos bailes locos y un vino.
Gracias a las letras, a los libros. A vosotros por hacerlos, a cualquiera por escribirlos. Por hacernos viajar y vivir todas las vidas que no estaban destinadas a ser para nosotros. Y aquí están. Al alcance de la mano.
Feliz día Internacional del Libro
Feliç Sant Jordi.