Girl "Niña" - Jamaica Kincaid

Girl "Niña" - Jamaica Kincaid




Niña
Jamaica Kincaid

Lava la ropa blanca los lunes y ponla a secar en la piedra; lava la ropa de color los martes y ponla en el tendedero; no camines sin sombrero bajo el sol; prepara las frituras de calabaza con aceite dulce caliente; remoja tu ropa pequeña en cuanto te la quites; cuando compres algodón asegúrate de que no tenga goma, sino no aguantara ni la primera lavada; deja remojando el pescado una noche antes de que lo cocines; ¿es verdad que cantas benna en la escuela dominical?; come siempre de manera en que no le de asco a los demás; los sábados trata de caminar como una señorita y no como la puta en la que parece te convertirás; no cantes benna en la escuela dominical; no debes hablar con vagos ni siquiera si te preguntan una dirección; no comas fruta en la calle—las moscas te perseguirán; pero yo no canto benna los domingos y mucho menos en la escuela dominical; así se cosen los botones, así se cose el dobladillo cuando veas que se está descosiendo para que evites parecer la puta en la que estoy segura te convertirás; así se plancha la camisa khaki de tu padre para que no queden arrugas; así se planchan los pantalones khaki de tu padre para que no queden arrugas; así se cultiva okra—lejos de la casa porque los árboles de okra atraen hormigas rojas; cuando cultives dasheen, asegúrate de echarle agua sino hará que tu garganta pique cuando te la comas; así se barren las esquinas; así se barre toda la casa; así se barre el patio; así se sonríe a los que no te caen muy bien; así se sonríe a los que detestas; así se sonríe a los que te caen bien; así se pone la mesa para el té; así se pone la mesa para la cena; así se pone la mesa si vas a tener un invitado importante para cenar; así se pone la mesa para la comida; así se pone la mesa para el desayuno; así te debes comportar en presencia de hombres que no conoces bien; así no reconocerán tan rápido la puta en la que te he dicho no te conviertas; asegúrate de bañarte diario, incluso si es con tu propia saliva; no bajes a jugar a las canicas—no eres niño, sabes; no recojas flores por ahí—podrías contagiarte algo; no avientes piedras a los mirlos, porque podría no ser un mirlo; así se prepara el pan, así se prepara la doukona; así se prepara un plato de pimientos; así se hace la buena medicina contra el catarro; así se hace la buena medicina para expulsar niños antes de que se conviertan en niños; así se atrapa un pez; así se regresa un pez que no quieras, para que no te pase algo malo; así se engatusa un hombre; así te engatusa un hombre; así se ama a un hombre, y si eso no funciona hay otras maneras de hacerlo, y si esas no funcionan no te sientas mal por entonces renunciar; así se escupe si te dan ganas; y así te quitas para que no caiga sobre ti; así se hacen nudos; siempre toca el pan para asegurarte que está fresco; ¿pero que tal si el panadero no me deja sentir el pan?; ¿quieres decir que después de todo serás del tipo de mujeres que el panadero no deja tocar el pan?.



~~ Review ~~ Relato publicado originalmente en The New York Times, más tarde en 1984 en
la antología "As the botton of the river". En apenas una carilla, Jamaica Kincaid nos relata las instrucciones que una madre le muestra a su hija para la vida. Un punto de vista patriarcal en el que la adoctrina en cuanto a conducta y tareas domesticas. Como debe comportarse correctamente una señorita para no acabar siendo una puta. 
Kincaid es capaz de crear desde la más pura sencillez y simplicidad un abanico de sentimientos acompañados de una crítica sublime a la sociedad. Una oda al feminismo, una bofetada de realidad.